lunes, 28 de mayo de 2012

PAÍSES BÁLTICOS 2012

13 de junio
Llegamos en avión a Vilnius, capital de Lituania. Dimos una vuelta por el centro. Nos llamó la atención la tranquilidad de la gente, y la amabilidad de los conductores. Es lógico, venimos de Italia.
Nos recomendaron un lugar de comida típica Lituana, pero Cuca eligió un Rodizio en un restaurante brasileño. Comimos hasta reventar por 600 $ uruguayos.
La gente de mediana edad para arriba, no sabe inglés. Debe ser por la influencia soviética. Nos costó entendernos con el que nos entregó la pieza del Bed and Breakfast, porque nosotros no dominamos el lituano como el italiano. Hablan más alemán y ruso que inglés. Los jóvenes hablan inglés.
14 de junio
Escribe Cuca Vilnius es una ciudad preciosa, muy amigable, tranquila pero a la vez animada, con mucha gente en los bares al aire libre (ahora que hace calor, en invierno  hay -20·C). Hoy tomamos un ómnibus y luego hicimos como 5-6 km caminando de mañana para ver un castillo (tapa de la guía Lonely Planet) y de tarde otro tanto recorriendo el casco antiguo. Como me cansé, volvimos al hotel en ómnibus. Fue fácil, me acerco a un joven y le pregunto en inglés y me contesta  muy amablemente. Y en otros casos, uso el lenguaje universal de las señas. Adivinen porqué uso la  1a. persona del singular cuando se trata de preguntar.
Ahora escribe Hugo: De mañana vimos Trakai, un precioso pueblo en una península rodeada por un lago, con casas de madera, que tiene un castillo muy fotogénico, situado en una isla. De tarde la ciudad vieja, terminando en una torre arriba de una colina, con lindas vistas del casco antíguo, el río y la ciudad moderna.
La gente tiene la piel muy blanca, ya que deben pasar un largo invierno encerrados. Y en esta época resucitan con gran vitalidad.
En varios lugares siento olor a sobaco, y no somos nosotros. Ya lo había notado en días de calor en Moscú hace 26 años. Era la época soviética y no debía haber antisudorales. Pero ahora y acá hay antisudorales. Puede ser que la gente que creció sin usarlos siga sin usarlo,  o puede ser que la fuerza de la primavera en contraste con el invierno genere una explosión hormonal en las lituanas que origine esos olores. No sé.
El nivel de vida de la gente parece bueno. No se ven inmigrantes como en el resto de Europa. Sin embargo, puntualmente vi hurgadores y juntapuchos. Eran jóvenes con apariencia de lituanos.
Tanto acá como en Italia, en muchos alojamientos no hay nadie en la recepción. Nos dan la llave de la puerta que da a la calle. Eso origina un problema de coordinación cuando llegamos, que nos obliga a avisarles previamente la hora de llegada y vienen a esperarnos. Por esa razón, a diferencia de viajes anteriores, nos resulta imprescindible viajar con celular, para llevar a cabo esa coordinación. Recibimos SMS desde Uruguay al 098601678 y desde el resto del mundo al 0059898601678. No atendemos llamadas por razones de $, ya que debo pagar yo las llamadas que recibo.
15 de junio
4 horas y media de ómnibus de Vilnius a Riga, que es la capital de Letonia. En el camino se ven muchos bosques naturales. Lituania tiene más del 30% de su superficie de bosques.
Paseo de orientación por la ciudad vieja, con subida al punto alto de la iglesia de San Pedro para ver la ciudad desde lo alto. Muy linda.
Después de cenar, todavía con sol, salimos a caminar. Se ven mesitas al aire libre en cafés y restaurantes por todos lados en plazas, veredas y calles. Gente muy animada, con mucha música en vivo. Están desesperados por aprovechar al máximo los pocos días de temperatura agradable que tienen. La ciudad está llena de ricones encantadores por su tipo de edificación, y muy coloridos.
16 de junio
De mañana fuimos a Jurmala, a 40 minutos de tren desde Riga. Es un balneario sobre el Mar Báltico, que pusieron de moda los rusos ricos, antes, durante y después del comunismo. La playa tiene linda arena, es muy larga, linda para caminar. El agua estaba menos fría de lo que esperaba. Más o menos como en algunos lugares de Italia. No me bañé porque venía viento fresco del Norte, y el color no era demasiado atrayente. El balneario era muy lindo para caminar, con una calle peatonal y otra, a una cuadra de la playa, muy arbolada y con preciosas casas de madera de aproximadamente un siglo.
De vuelta en Riga, fuimos a un barrio de edificios Art Nouveau. Son edificios en cuyas fachadas hay esculturas adosadas a la fachada, Es un estilo que personalmente no me gusta. Un edificio es un edificio, y una escultura es una escultura, pero entreverar las cosas es un cambalache. Pero había que ir, porque Riga, con 750 edificios Art Nouveau, es la 1era en el mundo en cantidad de edificios.
Riga tiene hermosos parques en el centro, apenas saliendo de la ciudad vieja. Uno de ello sigue un arroyo que podría ser igual al Miguelete, pero es un precioso parque, con árboles, flores, botecitos, y sin basurales ni cantegriles en sus orillas.
El país donde estamos, en español se llama Letonia, en Inglés Latvia, y en el idioma local se escribe Latvija, y creo que se pronuncia igual que en inglés. ¿Porqué en español es distinto? Creo que al gallego que estaba haciendo el diccionario se le entreveró Latvia con Lituania y le quedó Letonia.
Tanto en Riga como en Vilnius, en las afueras de las ciudades, se ven grandes conjuntos de edificios de la era soviética, todos juntos e iguales, y con una arquitectura aburridísima.
17 de junio
Seguimos en Riga. De mañana fuimos al mercado. Son 5 enormes galpones, y en verano, además, muchísimos puestos ambulantes en el exterior. En cuanto a frutas y verduras no son muy distintas a las nuestras. También incluyen puestos de ropa, calzado, etc.
De tarde fuimos a un museo al aire libre. Queda en las afueras de Riga. Adentro de un precioso bosque, como son todos los de estas latitudes, reconstruyeron casas, graneros, establos, molinos, iglesias, baños, etc del 1700, 1800 y principios del 1900, equipados tal como estaban originalmente. Es muy interesante, porque ilustra muy bien la forma en que vivían los campesinos en esa época. Todas las construcciones eran de madera, con techo de paja o de láminas de madera. Las ventanas y las puertas eran chicas. En el centro de todas las casas estaba la estufa a leña. Tenían que aguantar 20º bajo 0 en invierno. Eran mucho más inteligentes que los uruguayos construyendo estufas. En lugar de una gran chimenea por donde a los uruguayos se les escapa el calor, las construían sin chimenea. Es lógico que ahumaban, pero la boca de la estufa, que es por donde salía el humo, estaba en otra pieza ventilada y no calefaccionada. Y el cuerpo de la estufa estaba en la zona habitable. Las casas no tenían WC. No me quedó claro si usaban pelela, o tendrían que salir atrás de un árbol, arriesgándose a que se les congele todo. Lo que sí había eran baños para lavarse, que no integraban la vivienda. Con leña calentaban piedra, que introducían en una gran palangana para calentar el agua con la que se bañaban.
Con esta visita, matamos 2 pájaros de un tiro, porque además de disfrutar el museo, caminamos mucho dentro de bosques que nos encantan.
18 de junio
Recorrimos de nuevo la ciudad vieja de Riga, esta vez en forma más ordenada, siguiendo las recomendaciones de la guía. Se encuentran rinconcitos que son una joyita. Fuimos a la Catedral a escuchar un concierto de órgano, y, para que Cuca no se queje, fuimos a almorzar a uno de los tantos bolichitos con mesas al aire libre. Este estaba en lo que había sido el patio de un convento.
Es tan linda la ciudad vieja de Riga, que queremos seguir aunque las piernas y las articulaciones no quieran más. La solución fue tomarnos un trencito con motor eléctrico que hace un recorrido por los lugares más pintorescos. Los ojos y oídos siguieron disfrutando y las piernas descansaron. Y dije oídos porque en muchísimos lugares se oye buena música que tocan grupos por una propina. Es un placer escuchar esa música en el silencio de las calles casi sin autos. Hasta escuchamos La Cumparsita ejecutada por 4 chicas con 3 violines y un contrabajo.
19 de junio
Dos horas y media de Riga a Parnu, en Estonia. Dejamos las valijas en la estación de ómnibus y recorrimos la ciudad. Es conocida como ciudad balnearia y fuimos a ver la playa. Era parecida a la de Jurmala, pero sin gente porque hacían sólo 16º y mucho viento. Un parque lindo, y el centro es una peatonal y poca cosa más.
Dos horas más de ómnibus y llegamos a Tallinn, capital de Estonia. Dimos una vuelta de reconocimiento por la ciudad vieja y es muy linda, y similar a Riga, aunque más chica y con repechos. Además, está amurallada.
Quedó demostrado que las quejas de Cuca eran infundadas. Como recordarán, ayer almorzamos en un boliche con mesas al aire libre. Como consecuencia de ello, Cuca se sintió un poco mal del estómago, cosa que nunca le había sucedido cuando comprábamos comida en los supermercados. Con ello se demostró que yo no la llevaba a comer afuera para cuidar su salud, y no de machete. Por suerte fue un malestar muy pasajero que no complicó los planes.
Acá no hay sol de medianoche, pero hay crepúsculo de medianoche. No llega a ser de noche cuando empieza a amanecer. Por suerte traje tapaojos para poder dormir.
20 de junio
Pasamos todo el día caminando la ciudad. En cuanto a edificación es tan linda como Riga. Pero la supera por tener murallas, que con sus torres realzan la belleza de la ciudad, y también por tener una parte alta y una baja, con lo que se tienen vistas a distintos niveles. Y hablando de vistas a distintos niveles, para ver la ciudad desde lo alto, subí a la catedral (28 mts, 140 escalones), a la iglesia de Olaf (60 mts, 258 escalones) y al Ayuntamiento (34 mts, 120 escalones altos). Notarán que conjugué en primera persona del singular.
En la mañana se veían hordas de turistas de varias nacionalidades. Eran de varios cruceros que habían llegado al puerto.
Escribe Cuca Coincido con los comentarios de Hugo, pero agrego que está demasiado comercializada, no existe rincón donde no haya puestos de souvenirs o bares/restaurantes.
21 de junio
Dos horas y media de Ferry para ir de Tallinn a Helsinki, Finlandia. Helsinki es una ciudad muy moderna, ordenada, limpia, con lindos espacios verdes, pero le falta personalidad, le falta algo que la haga distinta a otras ciudades y que justifique la visita. No sé, capaz que estoy muy exigente porque vengo de ciudades con un encanto especial.
Muchos recomiendan un paseo a una isla llamada Suonmenlinna a 15 minutos de barco, y lo hicimos. No nos gustó. Tiene algunos césped bien cortados que los finlandeses disfrutan tomando sol y haciendo picnic después de un largo invierno, muchos restaurantes, un fuerte que no vale nada y algunas vistas.
En la ciudad vimos un parque llamado Explanade muy lindo y concurrido como todos los espacios verdes, un par de iglesias grandes con decoraciones doradas brillantes, una sala de conciertos diseñada por Alvar Aalto, que no nos gustó su arquitectura, y una iglesia moderna muy original. Yo guíaba mapa en mano, y le digo a Cuca que 50m más adelante, a la izquierda, está. Llegamos y no estaba.Me relajó todo, le preguntó al primero que encontró, y resultó que estaba, pero enterrada en la roca de la zona. Apenas asoma el techo, que está rodeado por un muro de piedra. Había cerrado, pero vichamos el interior y vimos fotos. Es circular, con paredes de roca viva, sin decoraciones, y muy luminosa, porque el techo tiene mucho vidrio.
22 de junio
Salimos en avión hacia Berlín.
Fin de Países Bálticos.

3 comentarios:

Unknown dijo...

Hola Cuca y Hugo! aquí con Polo seguimos con mucho gusto el viaje que están haciendo y las descripciones tan detalladas de cada lugar al que llegan. ¡Una maravilla!
Nos vemos a la vuelta y seguimos leyendo este magnífico diario de viaje.
Un abrazo:
Polo y Magdalena

Unknown dijo...

Hola Cuca y Hugo! aquí con Polo seguimos con mucho gusto el viaje que están haciendo y las descripciones tan detalladas de cada lugar al que llegan. ¡Una maravilla!
Nos vemos a la vuelta y seguimos leyendo este magnífico diario de viaje.
Un abrazo:
Polo y Magdalena

18 de junio de 2012 Hoy es el cumpleaños de Polo y nos vamos a Colonia Suiza al Hotel Nirvana por 2 días y pasearemos por Colonia que es tan linda.

Unknown dijo...

Hola Cuca y Hugo! aquí con Polo seguimos con mucho gusto el viaje que están haciendo y las descripciones tan detalladas de cada lugar al que llegan. ¡Una maravilla!
Nos vemos a la vuelta y seguimos leyendo este magnífico diario de viaje.
Un abrazo:
Polo y Magdalena